Todos decimos nada. Todos nada de nada. Todos amontonados mirando el piso. Todos muertos de miedo a dormir solitos. Todos tenemos náuseas de amores cariados. Todos rifamos besos y tragamos sapos. Todos vendemos algo. Todos compramos todo. Todos alguna vez arruinamos todo... Todos comiendo papa, pogo y sanata. Todos amaneciendo con el alma rancia. Todos somos los dueños de nuestras mentiras. Todos nos voltearíamos a nuestras amigas. Todos somos más guapos cuando no hay nadie. Todos con el culito lleno de parches. Todos fregando el suelo de nuestras vidas. Todos pisando mierdas que nos asfixian. Todos sabemos lo que nos merecemos. Todos somos la paja de nuestros sueños. Todos lloramos contra algún inodoro por un amor pifiado que se hizo moco. Todos.

Que te dio esa mujer, 
que yo no pueda darte  Dime que tiene ella que yo, que yo no pueda darte. Dímelo, dímelo, que tiene ella dímelo, dímelo,  Que tiene ella dímelo, dímelo que tiene ella dímelo,  Dímelo. Cuando muera la pasión la tormenta pasara como Un barco sin timón perdido en alta mar quedaras. Yo no te voy a rogar porque yo no se rogar,  Tu tendrás que decidir, o ella o yo.

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